Antes de comenzar el Mundial sentía un ambiente de euforia en el pueblo colombiano y una gran exceptiva respecto a la inauguración. Será que una semana después de haber comenzado, todo ha salido como se esperaba?
Hoy me dedico a hacer este comentario solamente desde el ámbito futbolístico y lo que se ha vivido dentro de los estadios.
El día de la inauguración, las 50.000 personas presentes en el escenario gozaron como nunca esta fiesta, todo fue un gusto y la afición terminó ovacionando el acto.
Días después veo muchas críticas respecto a esta y me preguntaba ¿Por qué?, si todo había sido perfecto. Vi con calma la inauguración en mi televisor y muchas cosas no se vieron. Definitivamente la iluminación no fue la mejor y por eso en la televisión de todo el mundo no se vio el acto tal cual fue, era el momento de brillar frente al planeta y no se hizo, primer error.
En los dos últimos partidos de la selección brasilera he notado que la sombra de los jugadores se ve notablemente en el gramado barranquillero, sin duda la luminaria no es la mejor, segundo error.
El gramado en sí, en el costado de oriental no se le ve muy bien, tiene pasto quemado y se ve a simple viste la diferencia del color con el resto del terreno de juego, tercer error.
Hay que recordar que todo esto ha pasado ya comenzado nada más y nada menos que LA COPA MUNDO SUB 20, que es el segundo acto más grande de la FIFA a nivel mundial.
Reprochable acto también lo que se vio en Bogotá, la inundación al Campín, si, llovió muy fuerte, es verdad, pero eso no es excusa para que pasara lo que pasó, además en el entretiempo del partido Francia vs Corea, aún no había drenado y tuvieron que entrar unos hombres con una especie de trinche a destaparlos como si estuviéramos en la antigüedad.
En Barranquilla hay un octavo que va a ser Brasil vs Arabia (Nigeria) y en Cartagena un cuarto de final, nosotros peleamos porque aquí no hay cuartos de final. Pero, será que nos merecemos tanto?.
Las cosas no han sido malas del todo, también hay una cantidad inmensa de cosas buenas que destacar, atención a la prensa, alto nivel tecnológico, las cabinas, los camerinos, la infraestructura, en fin millones de cosas que no terminaría hoy, pero el mismo alcalde esperaba más.
Barranquilla aceptable, igualmente que en Bogotá, en el resto del país todo está como debe ser.
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